14 mar 2016

02/03/2016 Biblioteca Rossend Arús

"La Biblioteca Arús se fundó por legado testamentario del filántropo y miembro destacado de la masonería, Rossend Arús. Se inauguró el 24 de marzo de 1895. El edificio fue proyectado por Bonaventura y Pere Bassegoda. La farola modernista de la fachada se atribuye a Josep Lluís Pellicer que se encargó también de la decoración del edificio. La farola, de tres caras trapezoidales, es de hierro forjado y cristal helado, con unas dimensiones aproximadas de 150 x 40 cm".

Ver: http://www.poblesdecatalunya.cat/element.php?e=3478 

"Para acceder a la biblioteca es necesario subir una elegantísima escalera de mármol y, al final de ella, podremos observar una reproducción en bronce oscuro de unos dos metros de alto de la Estatua de la Libertad que ilumina, impertérrita, a todo aquel visitante que busca ser iluminado por todo el saber que encierra la biblioteca tras sus puertas.
Esta estatua, encargada un año antes ex profeso para la biblioteca Arús, fue construida por el famoso escultor Manuel Fuxà i Leal (el autor del Sant Jordi del Saló de Cent del Ayuntamiento de Barcelona o la estatua a Lope de Vega en la Biblioteca Nacional de Madrid) el cual se encargó de hacer la copia a escala del original neoyorquino. Sea como sea, no fue Fuxà el que hizo la estatua de bronce en sí -se puede ser un maestro de la escultura y no tener ni idea de fundición- sino que eso quedó a manos del maestro broncista italiano Odoardo Luis Razzauti, el cual repujó en plancha de bronce el modelo en escala reducida proporcionada por Fuxà. No obstante, la reproducción no es perfecta.



Efectivamente, cuando Fuxà diseñó la Estatua de la Libertad de la biblioteca Arús, no la diseñó exactamente igual a la de Liberty Island. En vez de poner "JULY IV MDCCLXXVI", es decir, 4 de julio de 1776 (fecha de la declaración de independencia americana) que es lo que pone en el libro que sostiene con su brazo izquierdo la estatua de Nueva York, Manuel Fuxà escribió en latín "Anima Libertas" (Libertad del Alma). De esta forma, la estatua proclamaba a todo aquel que la viera la libertad de conciencia que podría encontrar en aquel edificio, ya fuera por el acceso al saber que allí se acumulaba o por la proscrita adscripción masónica de sus patrocinadores.


Con todo, a pesar de que la figura fue construida para ser colocada en el vestíbulo de la biblioteca pública Arús el hecho de que la estatua se acabase con antelación a la fecha efectiva de inauguración de la biblioteca, permitió que este monumento en miniatura (si puede entenderse como miniatura una efigie de más de 2 metros) estuviera expuesto un poco más de un mes a partir de mediados de septiembre de 1894 en el salón principal de la redacción de La Vanguardia, la cual se encontraba en la Rambla de los Estudios, nº7. La inauguración oficial -ya que oficiosamente ya se había abierto al público anteriormente- fue el día 24 de marzo de 1895. 


La Estatua de la Libertad, obvia el decirlo, brilló con luz propia el día de la inauguración, y desde entonces no se ha movido de su situación de honor; posición que ha permitido que nuestra protagonista, durante 120 años, haya visto pasar mucha historia a sus pies. A pesar de todo ello, guste o no, la dejen lucir o la apaguen, sea grande o pequeña, la libertad humana, la filantropía, en definitiva, el saber, seguirá iluminando imperturbable como un faro una humanidad que, desgraciadamente, vive sumida en las tinieblas de la ignorancia más escandalosa".





































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